sábado, 29 de octubre de 2016

Como una fuerza de la naturaleza

Fue una bella jornada enmarcada por los bosques gallegos. Un nuevo encuentro de la Asociación EdNa (Educación en la Naturaleza) consigue reunir a medio centenar de personas en el acogedor albergue de Revolta Natural en Cospeito (Lugo). Desde este blog hemos defendido siempre la necesidad de trabajar juntos en pro de la educación en la naturaleza en nuestro país y estos encuentros -ya vamos por el tercero- demuestran no sólo que -en efecto- es importante, sino que además es posible. Con sumo cuidado por los detalles y la estética, las organizadoras lograron que nos sintiéramos en casa y estuviéramos plenos de inspiración para trabajar. Somos conscientes de que éste es un movimiento incipiente, con una enorme pujanza de nuevos proyectos, pero que sufre de un gran desconocimiento e incluso desconfianza desde el mundo de la educación convencional. Para EdNa es prioritario romper prejuicios y abrirse a la sociedad. Por ello, uno de los objetivos de este encuentro fue diseñar los criterios de calidad que deben tener los proyectos de educación en la naturaleza, tanto los clásicos (escuelas infantiles o incluso escuelas de primaria) como otros afines (grupos de crianza, madres de día, extraescolares, centros de educación ambiental…).  Los criterios de calidad permitirán que todos los proyectos podamos mejorar nuestros servicios y aspirar a una excelencia compartida; a los usuarios, a distinguir los proyectos de calidad, al tiempo que se respeta su diversidad; y a la sociedad en general, conocer y entender mejor los beneficios de la educación en la naturaleza. Criterios de calidad que además servirán de guía para proyectos emergentes que deseen trabajar con el rigor y la seriedad que este movimiento merece. Porque la educación en la naturaleza no es una moda pedagógica más. Apela a nuestra esencia, la naturaleza, un valor universal y eterno, que permanece más allá de coyunturas y tendencias. Ha venido, pues, para quedarse. Con calidad. Con fuerza.